Miskitus

Los miskitos o miskitu, son la etnia más numerosa e influyente del Caribe de Nicaragua. Habitan los pantanosos litorales, las sabanas de pinos y las selvas lluviosas de una vasta región del centro norte del Caribe nicaragüense y el sur de Honduras, región que históricamente se ha conocido como la Costa de los Mosquitos o la Moskitia.

La población de indígenas miskitu en las regiones del Caribe se localiza, mayoritariamente, en la región autónoma del Caribe Norte, donde cerca de un 60% se reconoce como miskito, sobrepasando a todos los demás grupos étnicos en su conjunto.

Localizados sobre el margen sur del río Coco o Wanki, en el Municipio de Waspam, y a lo largo del litoral Caribe, desde Cabo Gracias a Dios hasta la barra del río Grande de Matagalpa. Los miskitus han estado, desde el siglo XVII, en contacto con piratas, comerciantes y colonos ingleses, cortadores de caoba, huleros y misioneros moravos, por lo que su piscina genética es muy diversa a la de muchos otros grupos étnicos.

KING PULANKA

El King Pulanka se celebra en comunidades indígenas del Caribe norte de Tuapí, Krukira, Kamla, Santa Marta, Auhya Pihni, el Cocal y Bilwi entre los meses de enero a febrero de cada año con el objetivo de rememorar el período de la monarquía miskita.

Significa “el juego del rey o de los reyes”, donde se recuerda que nunca fueron conquistados ni por los españoles ni por los ingleses y que tienen un pasado del que estar orgullosos.

Pulanka surgió en 1788, con la existencia todavía de la monarquía, en la comunidad de Awastara, en el territorio indígena de Tawira, al norte de Bilwi.

Es común el baile del zopilote o Usus Mairen, por medio del cual los bailadores se visten de ropajes negros como estas aves y danzan la versión de Usus Mairen de Antonio Maravilla (canción tradicional).

Durante la celebración se reparte y comparte comidas y bebidas tradicionales tales como: Luk-Luk (carne de res con yuca), el Auhbipiakan (mezcla de carnes de guilla, venado, cusuco), Wabul (bebida dulce a base de bananos verdes cocidos mezclado con leche de vaca y/o leche de coco), Bunia (yuca molida fermentada) y el Tualbi o Samanlaya (bebida fermentada de caña y maíz).

 

Canciones Miskitas

Las canciones son suaves y lastimeras y todas suenan a lo mismo para el extranjero, quien es incapaz de distinguir entre las alegres y las tristes, salvo que haya vivido algún tiempo en la región. En la ciudad de Bilwi y alrededores, hay diferentes lugares donde se escucha casi en su totalidad música escrita en lenguaje miskitu que hablan del deseo y amor hacia una mujer.

Instrumentos musicales tradicionales

La música tradicional miskita mayormente era instrumental y la ejecutaba principalmente el Sukia o brujo, cuando practicaba sus encantamientos. En los últimos cincuenta años con el desarrollo tecnológico y la adopción de parte de esta cultura de nuevos instrumentos digitales como guitarra eléctrica, teclado y sintetizadores, los instrumentos tradicionales han sido sustituídos en su gran mayoría.

Sin embargo, en diversas festividades de las diferentes comunidades todavía se encuentran a músicos, usualmente los de mayor edad, que todavía tocan con los instrumentos de sus ancestros.

Lo introdujeron las guarniciones inglesas en el siglo XVIII. Los indígenas los hacen por sí mismos y los tocan durante sus fiestas con la ayuda de bolillos de madera, usualmente solo lo tocan hombres y a veces se usaban para anunciar alguna fiesta. Lleva el bit y sus pa- trones rítmicos son simples y fuertemente influenciados por la cumbia y el Palo de Mayo.

Son manipuladas por las mujeres principalmente, en especial durante las festividades mortuorias para acompañar las danzas. Estos chischiles se hacen de los frutos del jícaro, una vez removida la pulpa que contiene a través de un agujero hecho en el tallo. Se intro- ducen luego piedrecitas, semillas duras o frijoles.

Se utilizan más en las festividades de los muertos. Son de uso regular y miden cerca de un pie de largo, provistos de dos, tres y hasta cuatro agujeros. Los hacen de una especie de bambú que los Miskitos llaman bratara.
Flautas cortas de un solo tono se fabrican del hueso femoral del venado, la danta o de otros animales grandes. Sirven para atraer a la guatusa imitando el sonido de este roedor y por esto se las llama Kyaky wasbaya.

También conocida como charrasca, cacharaina, charaina, carretilla o kahuaha, se usa como instrumento de percusión en varios lugares del continente sobre todo los de fuerte presencia africana. Es elaborada con el maxilar inferior o quijada de un burro o caballo que es hervida y secada, y también puesta en un nido de hormigas para que quede libre de residuos orgánicos para que los molares se aflojen y produzcan un castañeteo. Dependiendo de la técnica de ejecución se obtienen dos sonidos. El primero implica golpear la parte final de la quijada con la palma o el costado de la mano cerrada, ocasionando la vibración de la dentadura. El segundo se obtiene al frotar la fila de dientes con un palillo de madera.